Playa Sangrienta

Película de inicios de los ochenta que recoge los ingredientes de las películas de los años cincuenta bastante floja, con una dirección mediocre y argumento con lagunas. Su planteamiento pudo dar origen a películas como “temblores” pero ni por asomo la disfrutas igual. Lo único interesante que puedes sacar de ella es ver al actor David Huffman y lo que pudo haber dado si no le arrebataran su vida en 1985 al ser apuñalado en un robo, o a Burt Young en un papel típico suyo de cuñado de Rocky, o a John Saxon que le pone la testosterona machita a la película.
Con ello, el film pretende dar un humor negro con los diálogos pero claramente no lo consigue, dejando a medio camino una película de terror absurda.