Transformator (Mente Asesina)

Chabacano producto semiamateur que pese a todo tiene su punto, precisamente por ese aire grindhouse y kitsch, a fin de cuentas es un film de serie Z con todo lo bueno y malo que ello conlleva (en éste caso más malo que bueno), pero pese a todo se disfruta siempre que la veas sin mas pretensión que pasar un rato desternillante sin más, ya que es imposible buscarle el sentido a éste tipo de películas, y es una sucesión de escenas muchas veces sin solución de continuidad ni coherencia pero que de manera (muy) aislada tiene momentos involuntariamente descacharrantes. En realidad la peli empieza bien, y hasta puedes llegar a creer que te vas a divertir bastante dado su bizarrismo casposo y humor de brocha gorda, pero a partir de los 10 minutos va cuesta abajo y sin frenos hasta la parte final que remonta algo con el clímax final y el monstruo de marras que para lo que se suele ver habitualmente en el subgénero, no está nada mal hecho. Muy ochentera,eso sí. Se le puede echar un vistazo, especialmente para nostágicos de los efectos cutres y artesanales, tan tipicos de ésa década.